w a l k o n e a r t h es el lugar donde desahogo mi conciencia y aplasto mis frustaciones. También lo hago en otros lugares, pero me pagan por ello...



jueves, 3 de septiembre de 2009


No hay luz al final del túnel
Seguro que lo a continuación expuesto, todos o casi todos los profesionales independientes del fotoperiodismo os lo habéis planteado ya.
¿Qué está pasando con la reducción de tarifas impuesta por los medios de prensa gráfica?, ¿es a causa de la crisis omnipresente? , ¿tal vez un aprovechamiento de la coyuntura poco o nada justificado?. Supongo que habrá de todo en el corral.
El hecho es que los que tan apasionada y espiritualmente nos dedicamos a esto, y no descubro nada, “pringamos” por todas partes: menos dinero, más trabajo y, si cabe, menos reconocimiento. Voy a intentar dar mi opinión y explicar esas tres apreciaciones.
MENOS DINERO. Claro, como no hay publicidad, se venden menos ejemplares y los costes de producción son los mismos mejor pagarle menos al colaborador y así compensamos pérdidas. El colaborador es un extraño ser que logra subsistir sin hipoteca, sin alimentarse y sus hijos nacen enseñados, no requieren asistir al colegio bajo ningún concepto. ¿Para qué quiere el dinero el reportero independiente? Si trabaja de esto es por qué le gusta, él lo ha escogido. Encima se pega unos viajes enriquecedores de padre y señor mío, que muchos quisieran…!, vive unas experiencias alucinantes de las que alimentar a su familia y a sí mismo. Que no se queje. Eso sí sus fotos y textos deben llenar las páginas de las revistas y los diarios, para que los medios puedan ofrecer algo al lector. Ofrecerle algo y que page por ello, lo mismo o más que antes. A la vez ofrecerle un espacio al anunciante (a precios desorbitados) para que le venda cosas al lector (a veces ese lector, paradójicamente, es colaborador de esa revista o diario). Qué lío.
Y el freelance, campechano y simpático, acepta sin rechistar. Si no le compran el reportaje a otro: una presa más fácil, con más gastos fijos, más atado de pies y manos a la puerta del banco. Además, los integrantes de cualquier redacción son gente sana que entienden nuestros problemas, que los comparten, que no quisieran que fuera de este modo. Ellos sólo hacen de mensajeros y con ellos no vamos a luchar, ellos no deciden. Y esto lo saben los que deciden y lo utilizan.
Los que deciden y actúan son los del piso de arriba, los que piensan en números y no en letras o imágenes. Los que no dan la cara. Hay que vender y no importa que se le da al lector y menos aún que se le da al autor.
MÁS TRABAJO. Estoy empezando a tener cara de TIFF y mis células se están transformando en pixeles. Mi dedo índice derecho “clica” sobre todo lo que toca y mi familia está empezando a conocerme por el tipo ese que siempre está en el estudio, delante del ordenador y mirando fotos compulsivamente (no es verdad, he sacado tiempo para quejarme en este blog). Tengo que trabajar más ya que por el mismo trabajo me pagan menos y he de compensar, y encima todo lo que necesitamos para vivir es más caro cada día que pasa, digo yo. En ocasiones me sorprendo angustiado y decido trabajar mejor aunque sea por menos dinero, es la forma de escapar hacia adelante y que no se olviden de ti en las redacciones. Hay una legión de nuevos llegados, algunos buenos y otros unos chapuzas, que regalan su trabajo y su futuro y eso es un bombón para los del piso de arriba, ¿se acuerdan de ellos?. Además la era digital ha traído cosas buenas pero también malas, como por ejemplo la dedicación infinita a la fase de postproducción de la imagen, la que viene después de apretar el botón del obturador. Y eso no se cobra, amigos.

MENOS RECONOCIMIENTO. Como cobramos menos es que seremos menos buenos. Claro, no nos valoramos y con razón. Además aquel que ahora empieza cobra mucho menos, ¿por qué el que lleva veinte años ha de cobrar más?. No está justificado. Ja.
Tan solo somos reporteros independientes, no somos mediáticos ni aunque nos revienten un pie en Afganistán o nos secuestren en el Kurdistán. Que un reportaje tuyo lo contemplen 100.000 personas o diez veces más no cuenta. Que las páginas que abarca tú reportaje estén valoradas en publicidad en un montón de miles de euros no cuenta, que te hayas jugado el físico o que hayas estado tres semanas sin ver a tus hijos no cuenta. Cómo lo has escogido tú…
Porque claro, el director financiero de un diario, o el director de marqueting de una revista, o el piloto aéreo o el jugador de fútbol profesional o el escritor de best sellers (con todo el respeto y reconocimiento) no han escogido como quieren ganarse la vida, se lo han impuesto y por eso es normal que se levanten esa pasta y que se les reconozca tan efusivamente.
Yo, amigos míos, no pido reconocimiento social ni ruedas de prensa si no hacen falta, sólo que nuestro trabajo sea considerado como debe. Que se valore más, no mucho más. Que se cobre de forma puntual, que al que hace las cosas bien se le tenga en cuenta. Que el que sea parte de la solución pase por delante del que forme parte del problema. Que lo hemos escogido nosotros es una evidencia, como todas las demás profesiones en cierta medida, pero que eso no quite valor a nuestra labor. Que para eso se llenan las revistas e Internet de fotos y artículos, para eso se venden, para eso hacemos soñar en destinos remotos, en paraísos. Para eso informamos y denunciamos las vulneraciones de los derechos de los débiles y sobre todo y humildemente nos erigimos en altavoces de los que no tienen fuerza ni para gritar. Para eso intentamos que los culpables no resulten impunes. Para eso somos un servicio más.
No parece que haya luz al final del túnel, pero eso no significa que tengamos que abandonar, sólo que hemos de avanzar en la penumbra y acostumbrarnos a ella. El poder de la imagen sigue siendo muy fuerte y nuestro momento volverá. Es cuestión de resistencia, esto, queridos amigos, lleva a la victoria. Haced las cosas bien, mejor que nunca y defended lo que hacéis. Combatid para que os valoren como os merecéis.

11 comentarios:

  1. ¡Felicidades por tu nuevo blog!Este post me ha encantado. No sólo porque refleja la realidad a la que nos estamos enfrentando cada vez con mayor frecuencia –y en todas las profesiones, por cierto- sino también por su amenidad y por el tono simpático que has utilizado.

    ¿Cómo crees que podemos luchas contra la "mediocridad low cost" que parece ser la única que se lleva el gato al agua en estos momentos?

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  2. Gracias por tu palabras. Me hacen compañía... una fraterna compañía.
    No voy agregar leña al fuego, pero me han hechado de un Estudio de Fotografía de fotos de boda por quedarme con algunas imágenes que he publicado en mi blog... es decir siento no solo querer ser despojada de una paga que me corresponde, sino también de vivir el atraco a mi proceso creativo.
    Me he topado circunstancialmente con una frase de la película Star-Trek que voy a transcribir por considerarla adecuada para tu texto Alfons:
    "Resistance is Futile"...nos obligan a ser mártires de las causas que realmente tranforman el mundo para beneficio de los desfavorecidos... "Resistir" implica asistir a tu suicidio... y sin embargo, es la única alternativa para los fotógrafos de nuestra estirpe, con la esperanza que las futuras generaciones puedan ver la luz al final del túnel.
    Es cierto también que nuestra situación no es exclusiva a nuestra profesión... desde la Industria lechera hasta la Industria de la música se ven estranguladas por involuciones sistémicas.
    Finalizo con una incongruencia... con un capricho de mi mente, pero sobre todo con una frase que tal vez encienda una lamparita en un tu cerebro más sabio que el mío: "cuanto te encuentras en un callejón sin salida, la única alternativa de supervivencia es salir por donde has entrado".
    Un fuerte abrazo para tí y tu esposa (a quien recuerdo con muuucho cariño de nuestra etapa Osborne). Claudia Abrantes

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  3. Alfons!
    Felicidades por tu blog!
    Decirte que esta crisis es como la gripe A: solo sirve como escusa para acojonarnos y hacer con que todo aun parezca peor de lo que está en realidade. Y sobre todo sirve para que los que pueden saquen aun más partido de los que no podemos... Pero "que te iba a decir"??? Sobreviviremos!!! Y saldremos de todo esto aun más fuertes!
    ANIMOS!!!
    Sofana

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  4. Alfons, Lo has clavado.
    enhorabuena por el blog
    Un abrazo
    Jose Maria de Pablo

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  5. Querido Alfonso: lo de la cara de TIFF me ha encantado. Es exactamente la que se nos está poniendo a todos. Con y sin máscara de enfoque, aunque con mucho ruido. De lo demás, pues es lo que hay y tendremos que traginar con ello. En todo caso es un placer que un gran fotógrafo como tú se anime a robar todavía más tiempo a la familia para escribir este ameno blog. Bueno, quiero decir, un placer para los que lo iremos leyendo, claro. Un abrazo. Tino

    PD - Mientras mi ordenador se toma su tiempo para almacenar las fotos n las diferentes carpetas aprovecho para leer los blogs de los colegas. Algo buen tíene, pues, la post-producción.

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  6. Hola Tino, querido colega.
    Y entre revelado digital y revelado digital siempre nos quedará el recuerdo de los lugares visitados y las personas conocidas mientras trabajamos. Siempre nos quedará la satisfacción del trabajo hecho lo mejor posible y sobre todo nos quedará el reconocimiento de los que valen y tienen criterio. Los demás, son los que pagan con cacahuetes el esfuerzo y la dedicación.
    "De buen rollo" como dice mi hijo.
    Abrazos. Alfons.

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  7. Hola Alfons.
    No había leío este post, gracias por recordarnoslo.
    Un año después sigo sin ver la luz al final del túnel, es más, creo que el trayecto de oscuridad es aún más largo de lo que me imaginaba y lo peor, el túnel se ha llenado de humo negro. No se puede respirar. Yo al menos me ahogo. Y conmigo la vocación, la ilusión, la confianza en este trabajo tan bonito pero tan prostituido.
    No se que va a ser de nosotros pero mientas tanto propongo comprar una linterna y si nos alumbramos unos a otros a lo mejor podemos avanzar más seguros mientras saboreamos el último puñado de cacahuetes.

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  8. Amiga Nani,
    Hay Luz. Si nos alumbramos los unos a los otros, es decir nos unimos, habrá solución.
    Lo de los cacahuetes hará que mantengamos la línea. Seremos fotógrafos esbeltos, unidos y triunfadores. No te desanimes y sigue con tu trabajo. Hay otras formas y tu ya las sabes.

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  9. Alfons!
    ... no había visto hasta ahora
    ... extraordinario fotógrafo, ... lúcido crítico del estado de la profesión
    ... en lo personal voy por caminos gráficos diferentes, ... pero suscribo absolutamente lo de ser cada día mejor fotógrafo
    ... pero la (restrictiva) realidad económica se me va imponiendo y comienzo seriamente a re-plantearme volver a la segura profesión de la medicina
    ... ahora, ... nunca será a costa de dejar la pasión por mirar y fotografiar también lo que tenga + cerca, ... a la vuelta de la esquina o un poco + allá
    ... gracias por esta iniciativa de compartir inquietudes, observaciones y (diría), ... lucidez
    Un abrazo

    Miguel

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  10. Alfons!
    ... no había visto hasta ahora!
    ... me parecen buenísimas tus reflexiones & comentarios; jodidamente positivistas
    ... no tengo dudas que la única vía es ser cada día mejor; y a la vez me temo que eso no da garantias materiales de nada; solo el orgullo de hacer y presentar trabajo del que te puedes enorgullecer
    ... en mi caso recomienzo a actualizarme en mi profesión académica, la medicina; mi pareja y mis hijos me lo reclaman (silenciosamente)
    ... ahora, .. tengo muy claro, que la pasión de mirar y fotografiar, aunque sea, lo que tengo a la vuelta de la esquina, ... no es algo que vaya a dejar de hacer nunca
    ... sí, ... es eso, ... la pasión de mirar, ... de ordenar coordenadas espaciales, ... en el flujo del tiempo
    ¡¡ Felicidades estimado colega por todo; tu trabajo & tu energía de compartir lucidez!!

    Un abrazo

    Miguel

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  11. Apreciado Miguel,
    Claro que la medicina es otra de las grandes armas para luchar por un mundo mejor. Pero no dejes de mirar y fotografiar nunca colega. Tu mirada es necesaria y tu oficio de fotógrafo ya es imposible de olvidar...
    Un abrazo grande y hasta pronto.

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